Corriente continua (CC)

La corriente continua es un tipo de corriente eléctrica en el que las cargas eléctricas se desplazan a través del conductor eléctrico sin variar su sentido. Este tipo de corriente también se la conoce como corriente directa.

En muchos dispositivos el símbolo para indicar la corriente continua es DC (direct current). También se utiliza el símbolo de una línea continua (-) flanqueado en tres líneas más cortas (---). Para la corriente alterna que se utiliza en lugar de AC ( corriente alterna ) o el símbolo (~).

El flujo de cargas se produce a través de un conductor eléctrico, como podría ser un hilo metálico. El flujo eléctrico también se podría establecer a través de un semiconductor, un aislante o incluso al vacío como ocurre en un tubo de rayos catódicos.

En los circuitos eléctricos de corriente directa, la dirección del flujo de la intensidad de corriente siempre sigue el mismo sentido. En los circuitos de corriente continua, el sentido del flujo de la carga eléctrica siempre va del polo positivo al polo negativo por convenio. Sin embargo, los electrones se mueven en sentido contrario.

La primera red eléctrica comercial, desarrollada por Thomas Edison a finales del siglo XIX, utilizaba corriente continua. Hoy en día, las redes de transporte y distribución utilizan casi siempre corriente alterna a través de las líneas eléctricas. Esto se debe a las ventajas de la corriente alterna en cuanto a posibilidades que ofrece con respecto a la CC.

¿De dónde se obtiene la corriente continua (CC)?

Las primeras fuentes de corriente continua fueron las fuentes de corriente química: celdas galvánicas, luego se inventaron las baterías.

Para obtener corriente continua a escala industrial, se utilizan máquinas eléctricas: generadores de corriente continua. Estos generadores funcionan mediante el principio de la dinamo inventado por Hippolyte Pixii que es capaz de convertir un movimiento mecánico en electricidad.

Otra forma de obtener electricidad en forma de corriente continua es mediante la energía solar fotovoltaica.

Usos y ejemplos de corriente continua

La corriente continua se utiliza normalmente para aplicaciones donde necesitamos un bajo voltaje.

A continuación mostramos algunos ejemplos en los que se utiliza la corriente directa:

  1. Las placas solares fotovoltaicas generan una corriente directa que se debe convertir en un inversor que transforma la corriente alterna y continua.

  2. Las pilas de una linterna.

  3. La batería de un coche.

  4. La electricidad que circula a través del teléfono móvil.

  5. Las locomotoras de los ferrocarriles.

  6. Los motores de los pequeños electrodomésticos.

La mayor parte de los pequeños aparatos eléctricos que tenemos en casa funcionan con corriente continua. Sin embargo, la corriente que nos suministra la compañía eléctrica es corriente alterna. Por esta razón, se utiliza una fuente de alimentación para convertir la corriente alterna en directa.

¿Cómo convertir corriente alterna en continua?

Una de las formas de obtener una corriente continua es transformando la corriente alterna en continua mediante un alternador. Esta conversión se consigue mediante un proceso para enderezar la corriente, realizado con diodos o puentes rectificadores.

¿Qué es la corriente continua (CC)?Los alternadores eliminan la componente negativa de la corriente alterna, produciendo una corriente que no es continua sino pulsante unidireccional. Un condensador al lado del rectificador permite nivelar la señal, suministrando una corriente lo más cerca posible de un valor continuo.

Por el contrario, la conversión de una corriente continua en una corriente alterna es mucho más compleja. Los inversores de corriente son dispositivos capaces de realizar esta conversión.

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Fecha de publicación: 9 de agosto de 2016
Última revisión: 17 de mayo de 2022